A partir de los 40 años los ojos se convierten en una gran preocupación. Y es que la gravedad produce, con el paso del tiempo, un aumento de su tamaño y estiramiento de la órbita del ojo. A ello hay que sumar la pérdida de turgencia y resistencia de la piel y de los ligamentos. Hasta no hace mucho, la única solución realmente efectiva eran las operaciones de cirugía plástica, pero hoy existen otras alternativas que no requieren del bisturí.

Por eso, si tus ojos están empezando a mostrar los síntomas de una etapa de agotamiento, estrés, de momentos difíciles o de la edad, los tratamientos de estética de ojos son la mejor opción para devolver vida a nuestros ojos y vuelvas a tener una mirada radiante y espectacular. Este tipo de tratamientos ayudan a mejorar la circulación y por tanto a dar un nuevo aire a nuestra expresión. 

A la hora de reducir las ojeras y tratar de forma integral la mirada es necesario recurrir a tratamientos específicos que realmente sean capaces de conseguir tratar este inestetismo de forma integral y reducir las ojeras e incluso las bolsas que habitualmente las acompañan en la región periocular.

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                                ¿Por qué aparecen las ojeras y las bolsas?

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El origen de las ojeras es multifactorial , genética , alteraciones renales, hepáticas, desórdenes alimenticios  y por supuesto el inexorable paso del tiempo. Siempre achacamos las ojeras a una falta de descanso o problemas del sueño pero la cronificación de las mismas habla a las claras de otros problemas orgánicos.  En un principio vamos a encontrarnos con hiperpigmentaciones ( manchas) tanto en párpado superior como inferior y de una forma progresiva se ven acompañadas de bolsas sean de origen edematoso y/o graso. Es muy habitual que coexistan y nos hagan acometer el problema de una forma integral.   

                                            Así salen las ojeras

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La ojeras van a aparecer en una zona donde la piel es mucho más delgada que en la mayor parte de zonas faciales y con menor composición en fibras elásticas y de colágeno. Es una zona de formación habitual de arrugas y con facilidad para hiperpigmentarse, por  ello debemos ser cuidadosos cuando nos frotamos, secamos , e incluso dormimos. Podríamos favorecer su aparición.

Y así aparecen las bolsas

En el caso de las bolsas, se trata de abultamientos bajo o sobre  los ojos que son provocados mayoritariamente por la pérdida de tono muscular generando flacidez. O también por el exceso de grasa acumulada bajo el ojo. Si estas bolsas aparecen y desaparecen de forma intermitente estaríamos hablando de una composición edematosa (líquida) , y  su pronóstico suele ser mejor que cuando están compuestas de tejido graso.

En muchas ocasiones estamos ante un problema hereditario, donde la genética familiar juega un papel predisponente .

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                   Causas de las ojeras y de las bolsas perioculares

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Las causas pueden ser diversas pero principalmente las bolsas y ojeras se forman por lo siguiente:

• Enfermedades del riñón.

• Problemas de tiroides.

• Falta de descanso y de sueño.

• Mala alimentación.

• Causa hereditaria o genética.

                                 Diferentes tipos de ojeras

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Podríamos establecer diferentes clasificaciones de las ojeras, verlas de una forma más clínica o sólo enumerarlas de forma que puedas establecer conexiones con el problema que puedes sufrir, hablaríamos por tanto de :

• Hiperpigmentaciones perioculares.

• Arrugas perioculares, patas de gallo y surco Nasoyugal (comienza en el lagrimal y continúa con una dirección oblicua inferior).

• Laxitud de piel en párpados , inferior y/o superior.

• Bolsas edematosas (exceso de líquido)

• Bolsas grasas ( con contenido de tejido graso).

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         TRATAMIENTOS DE LA MIRADA Y CONTORNO DE OJOS

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